Cómo comprar una casa en los EE. UU. como ciudadano no estadounidense

¿Puede un ciudadano no estadounidense comprar una casa en Estados Unidos?

Es totalmente legal que un ciudadano extranjero (alguien que no sea ciudadano estadounidense) pueda comprar una casa en Estados Unidos.

De hecho, los compradores extranjeros adquirieron casi 100 000 viviendas en los EE. UU. desde abril de 2021 hasta marzo de 2022. Eso es aproximadamente el 2,5 % de las viviendas vendidas durante ese tiempo.

Los compradores de viviendas elegibles incluyen titulares de tarjetas verdes, residentes no permanentes, refugiados, solicitantes de asilo y beneficiarios de DACA.

Siempre que pueda calificar para la hipoteca, es probable que pueda comprar una casa. Sin embargo, puede haber reglas especiales adjuntas al comprar como ciudadano no estadounidense. Esto es lo que necesita saber

Hipotecas de extranjeros: la residencia es clave

Comprar una casa es más fácil para los prestatarios que tienen una tarjeta verde o una visa válida que les permite vivir en Estados Unidos.

Esto se debe a que prestar a los residentes legales suele ser menos riesgoso para las compañías hipotecarias.

Imagínese lo que sucedería si alguien que vive en otro país dejara de pagar una hipoteca estadounidense.

Sí, el contrato de hipoteca en sí estaría dentro de la jurisdicción de un tribunal estadounidense.

Pero el gasto de contratar abogados internacionales para hacer cumplir las sentencias estadounidenses y cobrar el dinero adeudado sería excesivo.

Las tres categorías de ciudadanos no estadounidenses son:

1. Residente permanente legal (LPR)

Un residente permanente legal es alguien que tiene una “tarjeta verde”. Los titulares de la tarjeta verde pueden solicitar préstamos hipotecarios al igual que los ciudadanos.

Los residentes permanentes legales pueden usar su tarjeta verde como prueba de residencia para obtener financiamiento y comprar una casa en los EE. UU.

2. Extranjero residente no permanente

Los extranjeros residentes no permanentes son personas que no son ciudadanos y que tienen autoridad legal para vivir y trabajar en los EE. UU., generalmente de manera temporal.

3. Refugiados y asilados

Según el Departamento de Seguridad Nacional, los refugiados y asilados “no pueden o no quieren regresar a [su] país de nacionalidad debido a la persecución o a un temor fundado de persecución”.

Los refugiados y asilados pueden solicitar una tarjeta verde después de un año de residencia.

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Fuente: 

MORTGIJ

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