Analiza cuidadosamente el estilo de vida que quieras llevar en tu nuevo hogar y empieza a separar deseos de necesidades. Recuerda que con un presupuesto limitado la palabra clave va a ser necesidades. Y en las cosas importantes de la vida, como la compra de tu primera vivienda, las necesidades suelen tener más peso que los deseos.
Comprar tu primera vivienda es una meta muy importante. A todos nos llega el día de pensar en ello.
¿Eres soltero o casado? ¿Tienes hijos? ¿Planeas casarte pronto? ¿Tienes mascotas? ¿Te encanta invitar a tus amigos a tu casa? Todo influye en la decisión de compra. Por ejemplo, si quieres comprar tu primera vivienda porque planeas casarte, el panorama cambia mucho a que si buscas un departamento de soltero.
Es necesario que tengas esto en mente para que la vivienda que elijas sea el respaldo de tu futuro.
Escribe una lista con dos columnas – necesidades versus deseos. Tus necesidades deben incluir cosas como la localización, la cercanía a colegios, el tipo de vecindario, el presupuesto, el número de dormitorios, los metros aproximados.
Si vas a compartir casa con otros miembros de la familia, deberías consultarles para incluir también sus deseos y necesidades. Lo creas o no, la estructura de la vivienda tiene influencia en el tipo de relaciones que se puedan llevar a cabo entre los miembros.
La compra de una casa puede dejarte exhausto si tienes dudas sobre tu elección. Ser realista desde un principio va a aclarar tu mente y reducirá el estrés.
A veces los compradores sienten la presión de que necesitan ciertas cosas impuestas para ser felices en un lugar. Es importante silenciar ese ruido. ¿Qué te hace feliz a ti? En MORTGIJ te ayudamos para que lo obtengas!
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